PATRICIA BARBA ÁVILA, MESA 1.

El impacto que el creciente guerrerismo expansionista de USA Corporation tendrá en  América Latina y el resto del mundo.

Ante los graves acontecimientos en Medio Oriente, en especial el derrocamiento del gobierno sirio y el control del país entregado a auténticos grupos terroristas por parte USA Corporation, el cártel criminal integrado especialmente por las poderosas corporaciones energéticas que deciden la agresiva política expansionista que ha causado a lo largo de la historia millones de muertes, devastación e indecible sufrimiento en el mundo entero. 

En este ominoso entorno global, la Cuarta Transformación enfrenta un reto monumental pues tenemos el infortunio de compartir más de 3,000 km de frontera con el vecino país en el que el verdadero poder lo ejerce USA Corporation que bajo la burda simulación de democracia que siempre ha imperado, han impuesto un bipartidismo en el que no importa quién llegue a la Casa Blanca, siempre se implementará la misma política empobrecedora no sólo de su propia población sino de otros pueblos del mundo. En esta ocasión fue Trump el que el establishment decidió que fuese su secuaz y tan claro es su sometimiento que todos los nominados para su gabinete son neoconservadores guerreristas tan rabiosos como los que pertenecen a la administración Biden. Porque los que hayan siquiera concebido que Trump se iba a comportar de manera diferente, en verdad que ignoran cómo se mueven los hilos del poder en E.U. Y es ante este desbozalado personaje que nuestra presidente Sheinbaum tiene que continuar defendiendo la soberanía e independencia de México fincadas en  un  proyecto tan ambicioso como la 4T. 

Y es justamente la diametral diferencia entre el proyecto mexicano basado en el cada vez más celebrado Humanismo Mexicano y el expansionismo de USA Corporation que desde la concepción de la Doctrina Monroe ha dirigido la relación de este criminal imperio con el resto del mundo, la que define la continua guerra sucia y afanes del Departamento de Estado norteamericano para hacer fracasar las políticas sociales y desestabilizar primero la administración de AMLO y actualmente la de Claudia Sheinbaum. Las sonoras y futiles amenazas  proferidas por Trump de incremento de aranceles y otros dislates que coronó con la estulticia de pretender convertir a México y también a Canadá en parte de USA, han sido enfrentadas por ambos líderes mexicanos con la autoridad y sólido poder proveniente del mayoritario apoyo popular, porque como ambos sostienen al mencionar lo dicho por nuestro Benemérito de las Américas “con el pueblo todo, sin el pueblo nada”, lo que les ha permitido coexistir con semejante cartel delictivo es el principio contenido en el 39 Constitucional: “todo  poder se deriva del pueblo y se  instituye para su beneficio”, espíritu de la auténtica democracia. 

No obstante lo anterior y pese a que en México los afanes intervencionistas de USA han fracasado al toparse con el creciente nacionalismo y politización de una ciudadanía cada vez más empoderada, tenemos que estar conscientes de que sólo con la consolidación del proyecto es como podremos prevalecer ante tal amenaza. Y aquí es fundamental referirnos a la imprescindible modificación en el comportamiento de Morena, cuya pasada dirigencia de manera preocupante se alejó de los principios fundacionales de este partido que le ha dado la espalda a su propia militancia y a desatendido la cara aspiración popular manifestada claramente en 2018 y reiterada en 2024 de desterrar la corrupción que como lo afirmó el ex presidente López Obrador y lo sostiene Claudia también, “es el principal problema del país” y causante de los graves problemas de desigualdad que el proyecto de la 4T está tratando de solventar. 

Lo que ha venido ocurriendo en Ucrania, Palestina y más recientemente en Siria, es el mismo expansionismo del que nuestro país ha sido objeto tanto con las dos invasiones que nos costaron la mitad de nuestro territorio, como con el injerencismo rabioso que hemos sufrido especialmente durante el período de 36 años de neoliberalismo con secuaces disfrazados de “presidentes” de México a partir de 1982 hasta 2018. El envalentonamiento del imperio al empoderar a terroristas para seguir saqueando los recursos de esa riquísima región en Medio Oriente, no sólo amenaza a los pueblos de aquella parte del mundo sino de América Latina, Asia y Africa en los que cada vez un mayor número de naciones están realizando esfuerzos por sacudirse el yugo imperial. Y es justamente por la formación de bloques tan relevantes como BRICS, creado en junio de 2009 por Rusia, China, India, Brasil y Sudáfrica y que ha crecido con la integración de 5 naciones más, que el imperio siente amenazada su hegemonía y por ello está recrudeciendo su violenta política expansionista con provocaciones que de no ser por la prudencia de gobiernos como el ruso, el chino y el iraní, ya hubiese desembocado en la III Guerra Mundial de la que absolutamente nadie se salvará. 

Qué tan inmoral tiene que ser un régimen como USA Corporation no sólo para promover el infame genocidio contra el pueblo palestino perpetrado por su enclave militar Israel, sino para financiar a organizaciones terroristas como Al Qaeda y su derivado Hayat Tahrir al Sham, responsable no sólo de los ataques del 11 de septiembre de 2001 -en colusión con el gobierno de George W. Bush- sino de decapitaciones y asesinatos de una brutalidad espeluznante. Sin duda alguna, el  nivel de perversidad es difícil de concebir. Y ni qué decir de las consecuencias desastrosas que el empoderamiento de HTS al Sham y otros grupos terroristas tendrá para la empobrecida población siria, especialmente las mujeres que bajo estos regímenes fundamentalistas son tratadas peor que animales con apedreamientos, azotes y otras iniquidades.

Finalmente, vivimos en México una histórica transformación iniciada en 2018 que, entre otros grandes retos, ha tenido que lidiar con la prepotencia e inmoralidad de USA Corporation y que pese a los enormes esfuerzos tanto de Andrés Manuel López Obrador, como iniciador de la 4T como de Claudia Sheinbaum, podría verse frustrada ante los afanes expansionistas del imperio porque, no nos quepa ninguna duda, de continuar esta política saqueadora y guerrerista, la raza humana y todo lo que existe en el planeta se extinguirá y lo único que puede frenar el  holocausto global es la convicción generalizada en cada nación de que sólo el pueblo puede salvar al pueblo como lo afirmó nuestro inolvidable héroe Ricardo Flores Magón. 

Ahora las torturas se llaman “apremios ilegales”. La traición se llama «realismo». El oportunismo se llama “pragmatismo”». El imperialismo se llama “globalización”. Y a las víctimas del imperialismo se las llama “países en vía de desarrollo”.  Eduardo Galeano